No podemos acabar este curso sin agradecer y reconocer la labor de uno de nuestros compañeros más queridos; Don Eugenio se jubila y deja un hueco que difícilmente se va a poder reemplazar.
¡Gracias por todas estas horas que has dedicado, no sólo a la docencia, sino a la puesta en marcha de la Biblioteca, a los libros, a tus libros!...Más de 5000 ejemplares han pasado por tus manos y han sido catalogados, restaurados, mimados y cuidados por ti.
Gracias por tu trabajo, por enseñar a los niños y mayores el amor hacia la lectura y por cuidar cada uno de estas obras como tú solo sabes.
Te echaremos mucho de menos